El Pomerania, también conocido como "Pom", es una raza descendiente de antiguos perros tipo spitz del Ártico. Su nombre proviene de la región de Pomerania (actualmente parte de Alemania y Polonia), donde estos perros comenzaron a ser criados en tamaños más pequeños. Sin embargo, fue en Inglaterra durante el siglo XIX, bajo el reinado de la Reina Victoria, donde el Pomerania ganó verdadera popularidad. La reina se enamoró de esta raza y ayudó a fomentar la cría de ejemplares cada vez más pequeños, transformando al Pomerania robusto y mediano en el pequeño y elegante perro de compañía que conocemos hoy.
A lo largo del tiempo, el Pom se convirtió en un símbolo de estatus entre la aristocracia europea y hoy sigue siendo una raza muy buscada, tanto por su aspecto de peluche como por su gran personalidad.
Tamaño: Pequeño
Altura: 18–24 cm
Peso: 1.8–3.5 kg
Esperanza de vida: 12–16 años
Colores comunes: Naranja, blanco, negro, crema, chocolate, azul, sable, y más
El Pomerania es un perro vivaz, curioso y lleno de energía. A pesar de su pequeño tamaño, tiene una gran confianza en sí mismo y no duda en hacerse notar. Es muy apegado a su familia y puede mostrarse desconfiado con los extraños, lo que lo convierte en un buen perro guardián. Le encanta ser el centro de atención y aprende rápido, aunque puede ser algo testarudo.
El pelaje del Pomerania requiere cepillado frecuente (al menos 3 veces por semana) para evitar enredos y mantenerlo limpio. Es importante cuidar sus ojos y oídos, y mantener sus uñas cortas. Aunque sea pequeño, necesita ejercicio diario para mantenerse equilibrado y evitar el sobrepeso.
Debe recibir una dieta equilibrada y adaptada a razas pequeñas. Es conveniente ofrecerle alimento de alta calidad en porciones controladas, ya que tiende a aumentar de peso si se lo sobrealimenta o se le dan demasiados premios.
Aunque es una raza generalmente sana, el Pomerania puede presentar:
Problemas dentales (frecuentes en razas pequeñas)
Colapso traqueal
Luxación de rótula
Alopecia (pérdida de pelo, también llamada “Black Skin Disease”)
Problemas cardíacos en edad avanzada
Visitas regulares al veterinario ayudan a prevenir complicaciones.
A pesar de su tamaño, el Pomerania necesita estimulación mental y ejercicio diario. Es ideal para personas que buscan un perro pequeño pero activo, y que disfrutan de la interacción constante con su mascota.
Si querés un perro compacto, elegante, cariñoso y con una gran personalidad, el Pomerania puede ser una excelente elección. Es perfecto para departamentos o casas pequeñas, siempre que reciba atención y actividad.
El Pomerania es mucho más que una carita bonita: es un perro valiente, afectuoso y lleno de vida. Requiere cuidados específicos, sobre todo en su pelaje, pero a cambio brinda compañía, alegría y un amor incondicional que conquista a cualquier hogar.
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